La tercera semana de febrero 2016 se convocó una reunión informativa, primero con directores de centros escolares y más tarde con representantes de AMPAS. La idea era dar las claves de la Orden para orientación sobre tiempos escolares, es decir, sobre la conveniencia, efectos y proceso para la demanda de una Jornada Continua.
Esta Orden capacita a los centros escolares a cambiar sus proyectos, siempre desde el consenso, sin correr, sin prisas. Se entienden cambios en el método, no pedagógicos sino metodológicos y que creen sinergias, y lejos de cualquier enfrentamiento, ni luchas estériles, garantizando los servicios actuales y los horarios existentes.
Se está creando un nuevo mapa de innovación de Aragón, pero también es cierto la singularidad de nuestra escuela rural.
Debemos garantizar un debate constructivo con posibles diferencias horarias, pero con proyectos de innovación que puedan traer esos cambios.
Los tiempos para el estudio han sido tan cortos que tanto el claustro como el consejo escolar, de forma unánime, decidimos esperar resultados de otros proyectos y en otros centros y tener más tiempo para el consenso e información de nuestras familias, ya que el proyecto tenía que llegar antes del 3 de marzo al Ministerio para su valoración, el 9 de marzo para su re-definición. Luego tendría que ser validado por 2/3 del claustro, aprobado por el consejo escolar y la fecha tope para votación por las familias sería para el 8 de abril (aprobado por un 55% de voto afirmativo).